Desde la asunción de competencias en 1997, en materia de conservación de la naturaleza por parte de la administración autonómica, OBIMASA desempeña las labores propias de un centro de alojamiento y recuperación de fauna silvestre.

La información relativa a los últimos años revela que los ingresos de fauna silvestre habidos en el ámbito territorial de la ciudad de Ceuta se encuentran determinados en su mayor parte por dos fenómenos: el paso de flujos migratorios de aves a través del Estrecho de Gibraltar, y el decomiso de ejemplares provenientes de Marruecos. De esta forma, los mayores porcentajes, en cuanto a número de ingresos, corresponden a rapaces (Accipitridae y Falconidae), tortugas moras (testudo graeca) y camaleones (Chamaeleo chamaeleon).

En cuanto al destino de los ejemplares, aproximadamente las tres cuartas partes de los ejemplares son finalmente liberados. Puede ser significativo que se constata un descenso en el número de ejemplares trasladados a centros de recuperación de la península, lo que podría deberse a una probable saturación de los mismos.

Por otro lado, se observa un incremento en los alojamientos indefinidos en las propias instalaciones de OBIMASA, correspondiendo fundamentalmente a especies de reptiles y mamíferos no autóctonas de la Ciudad de Ceuta, como son monos del Atlas (Macaca sylvanus), lagartos de las palmeras (Uromastix acanthinurus) u otros reptiles exóticos.