Restauración vegetal

Uno de los principales objetivos de OBIMASA es la recuperación de áreas degradadas de nuestro entorno natural, mejorando su funcionalidad ecológica. Básicamente, esta rehabilitación se consigue mediante la adopción de medidas que supriman los efectos negativos que puedan seguir produciéndose y la introducción de material vegetal perteneciente a las especies características del hábitat en cuestión. Es evidente la interrelación de esta línea de trabajo con otras propias de OBIMASA, como son los tratamientos forestales, la educación ambiental, el vivero forestal o la adopción de medidas reglamentarias.

No obstante, la principal característica de este proceso de restauración es la introducción mediante siembra, plantación o estaquillado de especies vegetales que hayan desaparecido de la zona, o bien sean actualmente raras o se encuentren en situación de amenaza. La reconstrucción de las comunidades vegetales autóctonas supone un incremento de la naturalidad y de la calidad de ese hábitat, por lo que también se ven beneficiadas las comunidades animales que le sean propias.

Atendiendo al valor ecológico, grado de amenaza y nivel de protección de los distintos hábitats propios de nuestra ciudad, se establecen las prioridades para efectuar la restauración de los mismos. Entre los principales casos trabajados hasta el momento, cabe destacar los alcornocales, los matorrales mediterráneos, las comunidades vegetales de ribera y los acantilados costeros.